Un sistema de rociadores contra incendios está compuesto por tuberías, válvulas, conexiones, accesorios y dispositivos diseñados para descargar agua con el objetivo de controlar o extinguir el fuego en su etapa inicial, protegiendo así vidas y bienes materiales.
Como mencionamos en nuestro artículo anterior, "Sistemas contra incendios. Tipos de rociadores y clasificación de riesgos", la protección contra incendios se rige por la norma NFPA 13 (Norma para la Instalación de Sistemas de Rociadores), que establece los lineamientos para asegurar un nivel adecuado de seguridad.

Normas que rigen los sistemas de rociadores
Normas que rigen los sistemas de rociadores
El diseño, instalación y mantenimiento de estos sistemas debe cumplir con los estándares establecidos por las siguientes normativas de la NFPA (National Fire Protection Association):
- NFPA 13: norma para la instalación de sistemas de aspersores.
- NFPA 13R: norma para la instalación de sistemas de rociadores en edificaciones residenciales de baja altura.
- NFPA 13D: norma para la instalación de sistemas de rociadores en viviendas unifamiliares, bifamiliares y casas prefabricadas.
- NFPA 25: norma para la inspección, pruebas y mantenimiento de sistemas de protección contra incendios basados en agua.
¿Cómo se activa un rociador?
¿Cómo se activa un rociador?
Los rociadores funcionan gracias a un bulbo central que actúa como detector térmico. Este bulbo contiene un líquido (acetona, metanol o glicerol) que se expande al calentarse, rompiendo el vidrio cuando alcanza una temperatura específica. Al romperse, el orificio del rociador se destapa y el agua fluye, chocando con el deflector para esparcirse en el área de cobertura.
El color del bulbo indica la temperatura de activación, lo que nos permite seleccionar el más adecuado según las condiciones del entorno. Esto asegura una respuesta eficiente ante un incendio.
Clasificación de los sistemas de rociadores
Clasificación de los sistemas de rociadores
Sistemas de tubería húmeda
Este sistema de protección contra incendios es uno de los más comunes y efectivos. Su diseño se basa en mantener la tubería de los rociadores completamente llena de agua a presión, lista para ser descargada en caso de activación. Algunas de las características principales son:
- Simplicidad y confiabilidad ya que su diseño básico reduce la probabilidad de fallas.
- El agua fluye de inmediato cuando se abre un rociador, minimizando el tiempo de reacción frente al fuego.
- Instalación más sencilla.
- Solo se pueden usar en ambientes donde la temperatura sea mayor a 4 °C para evitar el congelamiento del agua en las tuberías.
- Son recomendados para casi cualquier tipo de edificación, siempre que las condiciones de temperatura sean adecuadas.
Sistemas de tubería seca
En los sistemas de tubería seca, las conducciones están llenas de aire o nitrógeno presurizado desde la válvula seca, lo que impide la presencia de agua en las tuberías hasta que el rociador se active. Esto hace que el sistema sea adecuado para ciertos entornos con condiciones climáticas extremas. Algunas de las características principales son:
- Brindan una respuesta más lenta ya que el agua se tarda en llegar a los rociadores.
- Tienen una instalación compleja y costosa, pues requieren controlar la presión de aire/nitrógeno, asegurando un correcto funcionamiento.
- Son ideales para áreas donde las temperaturas pueden caer por debajo de los 4 °C.
- Se emplean en instalaciones que están expuestas a temperaturas extremas, como sótanos, almacenes frigoríficos, o regiones donde el clima es propenso a heladas.
Sistemas de diluvio
Están diseñados para ofrecer una respuesta rápida y eficaz en áreas con alto riesgo de incendio como son tanques de líquidos inflamables, petroquímicas, hangares, subestaciones, etc. Algunas de sus características principales son:
- No cuentan con válvula de cierre y se activan automáticamente cuando se detecta fuego.
- Tienen una respuesta rápida.
- Presentan una alta efectividad en riesgos críticos.
Sistemas de acción previa
Están diseñados para minimizar el riesgo de daño por agua al requerir una o dos acciones antes de que se permita el paso del agua a través del sistema.
Este sistema contiene aire a presión y requiere de una o dos acciones para permitir pasar el agua. Se dividen en:
- De enclavamiento simple. Funciona con una activación del detector, que detecta la presencia del fuego. En cuanto se activa, se libera el agua del sistema de rociadores, y el rociador se activa para permitir el flujo de agua y controlar el incendio. Este tipo de sistema es eficaz cuando se busca una respuesta rápida y directa una vez que se detecta el fuego.
- De enclavamiento doble. Este sistema requiere un nivel adicional de seguridad, ya que primero se activa el detector de incendio, lo que indica que hay un riesgo de fuego. Sin embargo, el agua no se libera inmediatamente y es necesario una segunda activación, que puede ser manual o de otro sensor, para permitir la liberación del agua. Este proceso garantiza que el agua solo se libere cuando se haya confirmado el incendio, evitando daños innecesarios en caso de falsas alarmas. Después de esta segunda acción, el agua fluye a través de los rociadores para controlar el fuego.
- Sistema sin enclavamiento. Este sistema es el más sencillo. En este caso, cuando el detector activa la alarma de incendio, el sistema libera inmediatamente el agua sin necesidad de una segunda acción. Esta configuración permite una respuesta rápida y directa ante el fuego, lo que es crucial en situaciones donde se requiere una extinción rápida para minimizar los daños.
Los pasos de activación de un sistema de acción previa pueden variar ligeramente dependiendo del tipo de sistema (enclavamiento simple, sin enclavamiento o enclavamiento doble). Sin embargo, todos los sistemas siguen un proceso común que involucra la detección de incendio y la liberación del agua solo después de ciertas acciones.
Revisión de la alineación de las tuberías
Revisión de la alineación de las tuberías
Es fundamental que las tuberías principales tengan una pendiente mínima de 2 mm por cada metro lineal. Está pendiente nos ayudará a garantizar un flujo adecuado de líquidos, especialmente en sistemas de drenaje y sistemas hidráulicos.
Por otra parte, los ramales que son las tuberías secundarias conectadas a las tuberías principales deben tener una pendiente mayor, de al menos 4 mm por cada metro lineal, para que fluyan correctamente y evitar posibles bloqueos o el regreso de agua hacia el sistema.
Manifold de un Sistema Contra Incendios
Manifold de un Sistema Contra Incendios
El Manifold es una pieza clave en la distribución del agua o agente extintor hacia las diferentes zonas de protección del edificio o área en riesgo. Su función principal es dividir y dirigir el flujo de agua hacia las diversas tuberías o rociadores, garantizando que el sistema se active de manera eficiente cuando sea necesario.
En nuestro Manifold, podemos configurar diferentes arreglos para adaptarnos a distintos tipos de sistemas, lo que nos permite ofrecer soluciones personalizadas según las necesidades de cada instalación, considerando varios factores:
- Tipo de ocupación.
- Nivel de riesgo.
- Distribución del espacio.
- Condiciones de temperatura.
Los sistemas de rociadores contra incendios son clave para proteger tanto a las personas como a los bienes en cualquier tipo de instalación.
En KINENERGY, contamos con la experiencia y el conocimiento necesario para asesorarte y ofrecer soluciones personalizadas. Si necesitas más información o asistencia, no dudes en contactarnos. ¡Estamos aquí para ayudarte!

Alberto Bribiesca
Diseñador FPS/IHS Jr.
Diseñador FPS/IHS Jr.