En el dinámico mundo laboral, la seguridad y la capacitación ocupan roles fundamentales en la protección y desarrollo de los trabajadores.

¿Puede el aire acondicionado ayudar a reducir la propagación del SARS-CoV-2? Recientemente, la OMS reconoció que existen indicios que sugieren que el SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19, podría transmitirse por el aire y que puede transportarse a través de partículas minúsculas de aerosol.

Un adulto promedio inhala más de 15,000 litros de aire al día. Esta interacción hace que el aire que respiramos sea un factor determinante de nuestra salud. La contaminación ambiental está incrementando y en muchas regiones del mundo el aire exterior está clasificado como inseguro para respirar.

Como lo comentamos en la primera parte del artículo, existe evidencia que se recaba y los beneficios que recabar esta información genera tanto para el diseñador como para el cliente final.